martes, 1 de abril de 2008

Hoy te escribo porque...

...pensé que era bueno que supieras,
que tus besos inauguran mis amaneceres,
que las lágrimas han limpiado mis pupilas,
y he tenido que ocultarlas, en mis parpados cerrados,
para saludarlas…otra vez, otro día de mi vida.

Si, hoy lo pensé y he querido que sepas,
que mi garganta se tranca al pensarte,
que algún gemido rebelde y malvado ha escapado de mi voluntad doblegada,
y te extraño, con nostalgia.

He agendado todas mis horas posibles,
para ocupar mi pensamiento hasta el hastío,
y evadirte.
Pero aparece tu rostro, tu sonrisa, tu voz, en mi memoria...
porque mientras más me aparto, más te acercas,
envuelto en mis deseos incumplidos,
ahogado en mi resignación forzada,
venciendo…a mis valores caducados.

Pensé que era bueno que supieras,
que te pienso, que te extraño…sin quererlo.

Por más que ruego a mi voluntad parcializada,
por más que invoco a mi lógica sensata.
Ha sido más fuerte el amor que en mi sembraste,
que todas mis tácticas de guerra.

Y es que no han valido mil argumentos,
no han servido mil aprendizajes.
No ha bastado el cortejo seductor de los desconocidos.

He recurrido a mis estimas.
A mis orgullos.
A mis batallas.
A mi conciencia.
Y no he podido olvidarte…
por más que me escondo de mi misma... estás en mi.

Hoy te escribo porque...
pensé que era bueno que lo supieras.

1 comentario:

Jinna dijo...

Qué bonito!! Espero que él lo sepa...

Un beso